Lo primero que tenemos que hacer antes de un
maquillaje, es realizar los cuidados básicos de la piel como limpiar, tonificar
e hidratar. Adicional a esto es
bueno hacer una exfoliación en la piel por lo menos una vez por semana. De esta
manera colaboramos a tener una piel saludable y el maquillaje lucirá con un
acabado perfecto, si utilizamos los productos correctos para cada tipo de piel.
Otro punto importante a
tener en cuenta, sin importar el tipo de
piel que tengamos, es que tenemos
que elegir productos con factor de protección solar. Los rayos solares son
muy fuertes hoy en día y pueden dañar nuestra piel generando manchas y arrugas
prematuras. Podemos evitarlo si somos consiente de la importancia del tema al
momento adquirir nuestros comenticos.
Piel normal:
Si tu rostro es suave al
tacto, generalmente no presenta erupciones y posee un color parejo y saludable,
se puede decir que tienes una piel normal.
Para este tipo de piel, lo mejor es utilizar bases líquidas,
son fáciles de aplicar y otorgan un aspecto muy natural. Ofrecen una cobertura
media, ya que no hay tantas imperfecciones para cubrir.
Piel grasa:
Si tu rostro luce
brillante, principalmente en horas de la tarde, tiene tendencia a erupciones o acné
y tus poros se ven grandes o dilatados, se puede considerar que tienes una piel
grasa.
Lo mejor para este tipo de piel es utilizar
bases liquidas a base de agua, libres de aceite, para no aportar más grasa de la que contiene
la propia piel. Si el brillo es muy intenso, también se puede recurrir a un
polvo volátil para "apagarlo", pero sin exagerar, ya que después de
un rato puede generar un aspecto acartonado en vez de terso y suave que es el
efecto que queremos lograr. Otra opción puede ser un base en mousse, son muy ligeras y dejan un efecto aterciopelado muy delicado y natural.
Piel seca:
Si tu rostro luce tirante,
se siente áspero al tacto, tiende a tener un color rosado y los poros son casi
imperceptibles, se puede decir que tienes una piel seca.
Para este tipo de piel es
fundamental escoger productos que humecten, suavicen y sellen la humedad en la piel. La base en crema es la elección perfecta, pero también se puede
utilizar bases liquidas enriquecidas con agentes hidratantes.
Piel mixta:
Es el tipo de piel más común.
Si tu rostro posee zonas con diversas características, grasa, deshidratada,
seca, acneica, y los poros son más dilatados en la zona T (frente, nariz y mentón),
estamos hablando de una piel mixta.
Lo ideal para este tipo de
piel, es combinar en cada zona los productos según las necesidades de las
mismas, pero la realidad es que no siempre tenemos el tiempo y la paciencia de
hacerlo, así que lo mejor es elegir una
base hipo-alergénica y a base de agua, o una base en mousse, aptas para todo tipo de piel.
excelente post. Con tu permiso lo comparto.
ResponderEliminarGracias Inmma, me alegro que te haya gustado!!
Eliminargenial informacion
ResponderEliminarhttp://losviajesysibaritismosdeauroraboreal.blogspot.com.es/
Gracias Immaaurora!
EliminarTambién estuve por tu blog, muy interesante. ¡Felicitaciones!